lunes, 21 de julio de 2014

Carta de una mamá, para quienes no me llaman mamá:





Yo tengo una bebé. Pero tú no la puedes ver, ni nunca vas a conocerla... La única manera de que puedas sentir a mi bebé es hablando con el interior de mi corazón y escuchando la profundidad de mi amor. Mi bebé es un ángel, y estoy orgullosa de haberla llevado en mi vientre, aunque haya sido por lo que ustedes consideren poco tiempo terrenal. Si solo pudieran comprender, ver más allá de lo visible, sentir más allá de lo superficial, y tocar más allá de lo tangible...ustedes también podrían llegar a conocer a mi bebé.
Si tan solo imaginaran, por un breve segundo, lo que es perder a un hijo en tu vientre...no les pido que lo imaginen durante varios minutos, o días, porque sería tan doloroso como lo que yo he vivido y mi intención es solo hacerte comprender. Si solo imaginaran lo que es guardar una camisa para embarazadas, con su olor a nuevo intacto, vendar tus pechos y a la vez tu maltrecho corazón.
Lo duro que es dejar de contar semanas, de ver tu vientre que no seguirá creciendo, de aceptar...
Si tan solo pudieran hacer que sus ojos miren más allá de mi vientre plano...entonces comprenderían, que aún soy madre. Yo tengo una bebé.

Te amo mi angelito Emma <3!